Bienvenidos al Blog de Gustavo Páez Huerta.

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lunes, 27 de mayo de 2013

El conocimiento te instruye, la sabiduría te transforma.

Recientemente he leído un articulo de un destacado periodista venezolano quien hace referencia a una serie de reflexiones relacionadas con el aprendizaje y la experiencia.  La capacidad de aprender es una de las cosas más fabulosas del ser humano, pero eso no significa que debemos acumular conocimiento a lo largo de la vida para ser expertos. Mucho mejor es aprender a ser sabios. El conocimiento te instruye, pero la sabiduría te transforma, escribe en su libro el psicólogo Walter Riso Pensar bien, Sentirse bien. Por sabiduría se refiere a un conocimiento más vasto y fundamental, se trata de como vivir mejor, estando bien con uno mismo y los demás.. Visto así,el conocimiento es la teoría acumulada y la sabiduría son las experiencias de vida que realmente nos enseñan. Para crecer no basta con saber, también hay que vivir con una actitud abierta a los cambios, aprender de lo cotidiano y dejarnos sorprender por el mundo.. Es lo que el maestro zen Shunryu Susuki llamaba la mente del principiante,  mantener una mente curiosa, atenta y flexible, sin dejarse atrapar por la creencia de saberlo todo.
De poco vale saber mucho si somos incapaces de llevar a la práctica todo lo que sabemos. Instruirse no es una perdida de tiempo, sin embargo, es fácil confundir la necesidad de acumular conocimiento con la oportunidad de ser felices tal y como somos con lo aprendido hasta el momento. De alli podemos vivir en equilibrio experimentando nuestro potencial y limitaciones, aprendiendo a crecer y no simplemente a saber más.
En este mundo donde la información disponible crece a un ritmo que ya escapa a la imaginación, ¿donde está la sabiduría? La respuesta es un asunto estrictamente personal, pero puede estar más cerca de lo que imaginas. Un buen comienzo es tener la mente y el corazón abiertos, y vivir la experiencia del presente con menos perjuicios y más atención.