Bienvenidos al Blog de Gustavo Páez Huerta.

Espacio para compartir experiencias, ideas, investigaciones, noticias y buenas prácticas en temas de Dirección Empresarial, Gestión del Talento y del Cambio Organizacional.

domingo, 3 de julio de 2011

Sinergia Negativa

Genéricamente utilizamos la palabra sinergia para describir procesos  o encadenamientos que cuando se combinan o  elevan, potencian el resultado final. Las sinergias empresariales se presentan entre las propias organizaciones o entre ellas y sus empleados o entre estos últimos entre sí.
Abundan los ejemplos de sinergias positivas a nivel de personas  y empresas, como por ejemplo, un buen ambiente laboral se traduce en mejor disposición al trabajo y en un resultado final de producción o servicios ampliados. También, el estimulo a la generación de ideas o innovaciones desata habilidades o contribuciones en el personal que de otra manera permanecerían dormidas.
Lamentablemente, al igual que existen sinergias que obran en forma positiva, existen sinergias que obran en forma negativa, las cuales comento a continuación:
1.       Los centros de poder mal orientados: En determinadas empresas el uso del poder, y su combinación con puestos y jerarquías pueden producir centros de influencia negativa para toda la organización, los cuales, por vía de ejercer su mando e influencia, perjudican la buena marcha de la empresa.
2.       Las no decisiones: Existen personas, áreas, divisiones o empresas donde no se decide. Las decisiones pasan al congelador, como si el tiempo por sí solo pudiera resolver lo que las personas no pueden o quieren.
3.       Las islas: Este es un mal que aqueja a muchas organizaciones, las áreas no se integran ni se coordinan, actual como islas y se vuelven territoriales, produciendo como resultado una gran descoordinación y pérdida de muchas oportunidades de mejoramiento de los resultados y del buen uso de los recursos.
4.       Aferrarse al pasado: Al igual que muchas personas, hay empresas que se aferran al pasado sin comprender que el mundo evoluciona y ellas también deben evolucionar. No quieren percibir las oportunidades, desafíos y riesgos del momento actual y las tendencias del cambio hacia el futuro, por lo cual no reaccionan a tiempo y cuando lo hacen , suele ser demasiado tarde.
5.       Los bandos: Son grupos de presión que se empeñan en sobresalir, por encima inclusive de los propios intereses de la empresa. Estos bandos generan grandes tensiones empresariales y suelen impedir en funcionamiento armónico de la estructura de la organización.
6.       Los meritos del otro: De fuerte presencia en las empresas, el apropiarse de las ideas de otros como propias para ganar meritos. Termina por generar fuertes rivalidades y desmotivación en el personal. Si no existe un buen reconocimiento por cada persona, puede sucederse el fenómeno generalizado de querer ganar meritos con esfuerzos ajenos.
7.       Las fieras: En muchas organizaciones las personas obran como fieras, rivalizando con sus compañeros, creando un ambiente de competitividad agresiva y mal sana, que pasa por encima de cualquiera con el fin de lograr el éxito propio. Este  ambiente genera un enorme desgaste  y termina por crear, inclusive, rivalidades personales de dimensiones impensables.
8.       La comunicación por rumor: Justamente cuando no existen buenas comunicaciones institucionales,  los comentarios, los chismes y los rumores hacen su reinado, generando en muchas ocasiones, actitudes negativas perjudiciales a la empresa y sus empleados.
9.       Rechazo al cambio: Todo cambio genera temores y es natural que exista una reacción de prudente expectativa mientras se producen las innovaciones o modificaciones, el problema surge cuando hay rechazo sistemático por el cambio, lo cual inmoviliza a las organizaciones impidiéndole modernizarse, adaptarse o transformarse.
10.   Jefes autoritarios y controladores: Quienes actúan como tales generan un ambiente negativo, de poco sentido de pertenencia  con perversión y temor por el mando.
11.   Los empleados cómodos: Hay organizaciones con empleados que no tienen compromiso y tratan de hacer lo mínimo necesario para permanecer en el puesto, frecuentemente se ocultan y mimetizan, nunca hacen nada por el progreso , la innovación y el mejoramiento decidido de su empresa, no corren riesgos  ni toman decisiones, e impiden que otros lo hagan.
12.   Falta de oportunidad o incumplimiento: Generan alta rotación, desmotivación en el personal y bajo rendimiento en las actividades propias de su funcionamiento.
13.   Mal servicio: Generan una percepción de mal trato y falta de respeto en sus clientes.
14.    Impuntualidad: Lamentablemente, este se vuelve un estado de ánimo de las organizaciones; todos llegan tarde y nada pasa, acumulando tiempos muertos y pérdida de interés, afectando la energía y disposición, causando enormes costos.
15.   Indisciplina: Por definición una empresa en una organización diseñada para que las cosas tengan un orden, si cada quien quiere hacer lo que se le ocurre, ese orden se pierde y al final, la razón de ser de la empresa también.   
16.    El desorden: Al igual que el anterior, el desorden empresarial y personal se traducen en mal servicio, falta de respuestas, mala imagen o pérdida de la importancia.   
Es de vital importancia reconocer estos síntomas para detectar la sinergia negativa y tomar acciones correctivas que nos permitan mantener una sinergia positiva que potencie lo bueno de cada organización y de la gente que en ellas trabaja.
Artículo de Carlos A. Mejia.
Revisado por Gustavo Páez Huerta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario